Se refiere a un gran volumen de trabajo que sólo es posible completarlo en un período prolongado.
Según la necesidad que se busca satisfacer, las épicas se pueden clasificar en:
-
Nuevo: Los nuevos sistemas se identifican por su independencia. Si un sistema no requiere la existencia de otros para funcionar, es un desarrollo nuevo. Al crear un proyecto desde cero, se debe solicitar toda la información posible para entender el trasfondo antes de empezar el desarrollo. Al finalizar, se espera la documentación del proyecto en su totalidad.
-
Adición: Las adiciones son sistemas que dependen de otros para funcionar. Es posible agregar una funcionalidad a un proyecto existente solo con información acerca del módulo que se va a crear. Al finalizar, se espera la documentación del módulo.
-
Reestructuración: Se le llama reestructuración a la mejora de las características no funcionales de un sistema. Si el sistema hace lo que debe hacer pero es lento o poco intuitivo para el usuario, se realiza una reestructuración que no influye en la funcionalidad esperada sino en las características al rededor de dicha funcionalidad. El esfuerzo para reestructurar un proyecto varía según la cantidad de cambios que se deben realizar, pero parte de un sistema existente, por lo que requiere menos esfuerzo que crear uno desde cero. El conocimiento de partida puede corresponder solo al módulo que se va a reestructurar. Al finalizar, se espera la documentación de los cambios realizados.
-
Corrección: La corrección se realiza cuando el sistema no funciona correctamente (referente a funcionalidad, no características). El esfuerzo para corregir un proyecto varía según la cantidad de errores que se deben solucionar, pero el proyecto ya existe y la estructura no se modifica, por lo que es el nivel que menos esfuerzo requiere. Inicialmente, se puede conocer sólo el módulo o algoritmo defectuoso y al finalizar, se espera la documentación de las correcciones realizadas.